Etretat, un sitio único en el mundo

¿Quién no conoce Etretat? Ese sitio mundialmente conocido con paisajes de postal es sin duda uno de los lugares más románticos del mundo. Ver el sol ponerse sobre los acantilados es un espectáculo que no se puede perder para nada.

Más tarde que su vecina Dieppe, la moda de Etretat y de los baños de mar solo será lanzada a partir de 1843 gracias a Alfonso Karr, novelista y periodista. Desde entonces, el pequeño pueblo de pescadores no dejara de desarrollarse para volverse uno de los pueblos costeros franceses inevitables. A partir de ese momento, las villas van a construirse a un ritmo sostenido, el casino abrirá sus puertas en 1852, grandes espectáculos tendrán lugar allí como operas de Offenbach. Etretat se volverá la ciudad costera turística por excelencia, el ferrocarril también incrementara su fama a partir de 1890.

Los pintores como Courbet o Monet acabaran de inmortalizar ese pueblo y sobretodo lo darán a conocer al mundo entero. Escritores famosos también se enamoraran de ese lugar: Maupassant, André Gide, enterrado cerca de allí, o bien Maurice Leblanc, que hará del picacho hueco la guarida de su famoso gentleman ladrón Arseno Lupin.

En resumen, en unos años, Etretat ha sabido acoger a los más grandes y hacerse un nombre entre los destinos inevitables por ver al menos una vez en su vida. Como decía Alphonse Karr: "Si debo enseñar el mar a un amigo, será Etretat".

A diferencia de su rival Deauville, Etretat siempre ha sido un pueblo y es esa alma que aun encontramos una y otra vez recorriendo los callejones de la pequeña ciudad romántica.